Domingo

Me levante sin saber nada más que mañana rindo... preocupación, pasa la mañana sin sobresalto, me aburro luego de comer y al tiempo me entere que es el día de los enamorados (por alguna razón creía que era el 21, como el día del amigo) el día continua pero ya sin poder estudiar, los nervios empiezan a ganar la batalla y no me dejan concentrarme, leo y leo pero no entiendo nada, entre todo ese caos te me cruzas, y me dan ganas de escribirte, decido no hacerlo y me doy por rendido con los libros.
Me voy a visitar gente a ver si me despejo y puedo volver a esta maldita materia. en medio de una conversación sobre nada decido mandarte un mensaje, te deseo feliz día, no sé porque pero tenía ganas de hacerlo... es cierto que no sé si es un día para saludarte o si es un día mas, ya que al fin y al cabo ninguno de los dos sabemos que es esto, solo sé que me hace sentir muy bien, que me da felicidad y un mensaje tuyo me puede cambiar el humor para todo el día, quizás te pasa lo mismo.
Me respondiste un mensaje raro, si te molesto me gustaría poder pedirte disculpas pero fue lo que sentí en el momento, por lo cual no serian sinceras mis disculpas y te prometí ser sincero...
No te voy a negar que me hubiese gustado otro tipo de mensaje pero es cierto que también lo entendí...